Verónica:
Preludio
( Segundo ataque)
Aquí estoy con mi cuerpo de jota
al acecho, siempre a expensas,
se me pone la carita de idiota
cuando hablo contigo ¿ Qué piensas?
El segundo ataque de mi flota
espero debilite tus defensas.-
Aitor un rojo, tú rojo…
La dama y el bolchevique
Ella estudiaba arte y confección
en la academia de una modista
el trabajaba en la obra de peón
y militaba en el Partido Comunista.
Él soñaba con hacer la Revolución ,
ella soñaba con ser una gran artista.
Ella tenía poderosos padrinos
empresa familiar, era de dinero,
el venía de familia de campesinos
conocía el sudor del jornalero.
La historia de dos clandestinos
que escondidos se decían: “ Te quiero”.
Sin faltar una noche él le escribía
canciones de amor desesperadas
y ella complaciente las recibía
una de cada tres madrugadas,
pero para mal le advertían
las señoritas de sus criadas,
a la contra también se ponían
los que de él eran camaradas,
a ellos les daba igual, se querían
por encima de clases desclasadas.
El que escribía y escribe canciones de amor desesperadas.
Aitor Cuervo Taboada.
Preludio
( Segundo ataque)
Aquí estoy con mi cuerpo de jota
al acecho, siempre a expensas,
se me pone la carita de idiota
cuando hablo contigo ¿ Qué piensas?
El segundo ataque de mi flota
espero debilite tus defensas.-
Aitor un rojo, tú rojo…
La dama y el bolchevique
Ella estudiaba arte y confección
en la academia de una modista
el trabajaba en la obra de peón
y militaba en el Partido Comunista.
Él soñaba con hacer la Revolución ,
ella soñaba con ser una gran artista.
Ella tenía poderosos padrinos
empresa familiar, era de dinero,
el venía de familia de campesinos
conocía el sudor del jornalero.
La historia de dos clandestinos
que escondidos se decían: “ Te quiero”.
Sin faltar una noche él le escribía
canciones de amor desesperadas
y ella complaciente las recibía
una de cada tres madrugadas,
pero para mal le advertían
las señoritas de sus criadas,
a la contra también se ponían
los que de él eran camaradas,
a ellos les daba igual, se querían
por encima de clases desclasadas.
El que escribía y escribe canciones de amor desesperadas.
Aitor Cuervo Taboada.
Ese final nerudiano me ha encantado.
ResponderEliminarNeftalí y Aitor, dos grandes poetas, dos grandes comunistas.
ResponderEliminarIncreible historia de amor, por encima de clases, que fuerza me transmiten tus versos, ojalá yo fuera la destinataria de ellos.