Otra visión de los Mundiales.
En estos días de fervor futbolístico que nos traen los mundiales, quisiera dejaros para la reflexión unos cuantos aspectos que a mi al menos me parecen interesantes y me preocupan, no busco, conste, herir sensibilidades deportivas ni patrióticas.
Antes de nada, quisiera felicitar al ejecutivo “socialista” por el golazo que nos ha metido, aprovechando el Mundial y el que el pensar casi único del populacho en este mes es “La Roja”, en una gran jugarreta han metido el tijeretazo y el recorte, digno de recordar este desmarque, sí señor, pura estrategia futbolera del míster Zapatitos.
Ahora bien, hemos de tener en cuenta que caben dos posibilidades, una es que España caiga eliminada, en este caso el fervor rojigualdo de “La Roja” no durará mucho y en Julio al gentío se le habrá olvidado el tema, con más pena que gloria, la otra posibilidad es que España llegué a la final y gané o quedé en los primeros puestos, en este caso el populacho estará entretenido hasta Septiembre, pan y circo, nunca mejor dicho. En ambos casos dará igual, porque el Mundial acaba casi en Julio y luego está el veranito y las vacaciones y el pueblo a lo suyo. Golazo del Gobierno.
Quizás me motive escribir esto, las conversaciones que he mantenido estos días con gente de mi entorno, con un amigo que anda sin curro y ya sin ayudas, sin un duro y sin saber hasta cuando estará sin currar, hablaba el otro día, me decía que por lo menos “La roja” le iba a ayudar a pasar sus penurias, que le ilusionaba, que España iba a ganar, que el verano sería una fiesta gracias a ello y que estaba contento, extraña contentura, luego quise tocarle la fibra y se la toqué. Le recordé que llevaba más de seis meses sin cobrar ayudas, que no tenía trabajo, que no sabía cuando lo iba a encontrar, que a sus 27 años eso de la independencia familiar ni la divisaba, y le dije también que jamás le vi acudir a ninguna manifestación o protesta por los derechos laborales del trabajador, a ninguna huelga, ni a ningún 1º de Mayo, eso sí, los partidos del Madrid y de España, ni uno se pierde el tío.
Ni mucho menos critico que le guste el fútbol, la selección o el Madrid, lo que sí me parece deleznable es que deje alinear su cabeza con motivos futboleros y que su condición de obrero se la sople. Acaso la selección o el Madrid le van a conseguir un empleo, acaso gracias a la Roja se va a acabar el paro, o acaso la Federación de Fútbol va a pagar las hipotecas y dar de comer a las familias de los 4.5 millones de parados (por poder podrían, pero casi que no).
Insisto, el fútbol me parece algo positivo, pero de esta manera no, sé de mucha gente que en estos momentos solo piensan en el Mundial y esto les hace “olvidarse” de sus miserias, miserias que no combaten y que resurgirán cual Ave Fénix después de Sudáfrica. Si gana España mi más sentida enhorabuena a todos sus seguidores, salir a celebrarlo, jactaros de ser los mejores y demás típicos tópicos, pero coño, que eso no os va a dar de comer, luchad por lo verdaderamente importante, luchad por vosotros mismos y por el futuro de vuestros hijos, los jugadores son burgueses, vosotros proletarios.
Leí que cada jugador español percibiría una prima de 600.000 euros si se ganan el Mundial a esto hay que sumarle lo que ya ganan por ir, publicidad y demás. Mientras en este Estado una de cada cinco personas en edad laboral, no trabaja por falta de empleo, miles de familias pierden sus casas por no poder pagar las hipotecas, en este país se empieza a pasar hambre en muchos hogares. Eso sí, si ganan, cien millones de pesetas por barba, esto me parece muy triste, no sé si os parasteis a pensarlo.
Por acabar, quisiera mencionar la hipocresía de un jugador de la talla de Casillas (conste, que para mi en lo profesional, es el mejor), el otro día desde su chalet de La Moraleja nos decía lo que le estaba afectando la crisis y como sufría por ello, venga ya, por favor, seamos coherentes.
Repito, no busco ofender a nadie, solo os dejo esto para la reflexión, el fútbol y la roja son dos ingredientes magníficos para tenernos distraídos, y mientras meternos goles en forma de carta de ajuste.
Aitor Cuervo Taboada
El fútbol es el opio del pueblo.
En estos días de fervor futbolístico que nos traen los mundiales, quisiera dejaros para la reflexión unos cuantos aspectos que a mi al menos me parecen interesantes y me preocupan, no busco, conste, herir sensibilidades deportivas ni patrióticas.
Antes de nada, quisiera felicitar al ejecutivo “socialista” por el golazo que nos ha metido, aprovechando el Mundial y el que el pensar casi único del populacho en este mes es “La Roja”, en una gran jugarreta han metido el tijeretazo y el recorte, digno de recordar este desmarque, sí señor, pura estrategia futbolera del míster Zapatitos.
Ahora bien, hemos de tener en cuenta que caben dos posibilidades, una es que España caiga eliminada, en este caso el fervor rojigualdo de “La Roja” no durará mucho y en Julio al gentío se le habrá olvidado el tema, con más pena que gloria, la otra posibilidad es que España llegué a la final y gané o quedé en los primeros puestos, en este caso el populacho estará entretenido hasta Septiembre, pan y circo, nunca mejor dicho. En ambos casos dará igual, porque el Mundial acaba casi en Julio y luego está el veranito y las vacaciones y el pueblo a lo suyo. Golazo del Gobierno.
Quizás me motive escribir esto, las conversaciones que he mantenido estos días con gente de mi entorno, con un amigo que anda sin curro y ya sin ayudas, sin un duro y sin saber hasta cuando estará sin currar, hablaba el otro día, me decía que por lo menos “La roja” le iba a ayudar a pasar sus penurias, que le ilusionaba, que España iba a ganar, que el verano sería una fiesta gracias a ello y que estaba contento, extraña contentura, luego quise tocarle la fibra y se la toqué. Le recordé que llevaba más de seis meses sin cobrar ayudas, que no tenía trabajo, que no sabía cuando lo iba a encontrar, que a sus 27 años eso de la independencia familiar ni la divisaba, y le dije también que jamás le vi acudir a ninguna manifestación o protesta por los derechos laborales del trabajador, a ninguna huelga, ni a ningún 1º de Mayo, eso sí, los partidos del Madrid y de España, ni uno se pierde el tío.
Ni mucho menos critico que le guste el fútbol, la selección o el Madrid, lo que sí me parece deleznable es que deje alinear su cabeza con motivos futboleros y que su condición de obrero se la sople. Acaso la selección o el Madrid le van a conseguir un empleo, acaso gracias a la Roja se va a acabar el paro, o acaso la Federación de Fútbol va a pagar las hipotecas y dar de comer a las familias de los 4.5 millones de parados (por poder podrían, pero casi que no).
Insisto, el fútbol me parece algo positivo, pero de esta manera no, sé de mucha gente que en estos momentos solo piensan en el Mundial y esto les hace “olvidarse” de sus miserias, miserias que no combaten y que resurgirán cual Ave Fénix después de Sudáfrica. Si gana España mi más sentida enhorabuena a todos sus seguidores, salir a celebrarlo, jactaros de ser los mejores y demás típicos tópicos, pero coño, que eso no os va a dar de comer, luchad por lo verdaderamente importante, luchad por vosotros mismos y por el futuro de vuestros hijos, los jugadores son burgueses, vosotros proletarios.
Leí que cada jugador español percibiría una prima de 600.000 euros si se ganan el Mundial a esto hay que sumarle lo que ya ganan por ir, publicidad y demás. Mientras en este Estado una de cada cinco personas en edad laboral, no trabaja por falta de empleo, miles de familias pierden sus casas por no poder pagar las hipotecas, en este país se empieza a pasar hambre en muchos hogares. Eso sí, si ganan, cien millones de pesetas por barba, esto me parece muy triste, no sé si os parasteis a pensarlo.
Por acabar, quisiera mencionar la hipocresía de un jugador de la talla de Casillas (conste, que para mi en lo profesional, es el mejor), el otro día desde su chalet de La Moraleja nos decía lo que le estaba afectando la crisis y como sufría por ello, venga ya, por favor, seamos coherentes.
Repito, no busco ofender a nadie, solo os dejo esto para la reflexión, el fútbol y la roja son dos ingredientes magníficos para tenernos distraídos, y mientras meternos goles en forma de carta de ajuste.
Aitor Cuervo Taboada
El fútbol es el opio del pueblo.
La verdad es que no creo que haga falta tener entretenido al pueblo para meterle goles por toda la escuadra, no hace falta un mundial, ni siquiera creo que facilite la labor.
ResponderEliminarY en cualquier caso creo estas alturas creo que hay opios mucho más potentes que el futbol, esa idea de que el futbol es el opio del pueblo lleva camino de convertirse en un tópico. En fin, no veo tan clara la vinculación entre una cosa y otra.
Un saludo
En ningún momento digo que el fútbol sea necesario para que nos marquen golazos, pero si que creo que tener al pueblo entretenido es una buena vía para hacerlo. Pan y circo, se resume a eso.
ResponderEliminarLo que es evidente es que el Gobierno ha aprovechado la euforia colectiva de la roja para meternos el plan de ajuste, por lo opino que la vinculación en este caso es más que clara.
Por supuesto hay otros opios con los que entretener al populacho y más potentes, pero el fútbol querido amigo es uno de ellos.
Cúanta gente saldrá a celebrar el hipotético triunfo de España y cúanta gente salió o saldrá protestar por sus derechos laborales? Otra vez veo la vinculación más que clara, sin típicos tópicos.
Pienso como tú que probablemente el gobierno ha querido intencionadamente, me atrevería a decir que descaradamente, aprovechar el momento para meter el tijeretazo, pero también creo que no sólo no le hubiese hecho falta sino que tampoco le va a servir de gran ayuda.
ResponderEliminarSoy de los que piensan que el pueblo se distraé sólo, no creo en manos negras que distraén al pueblo desde el poder, salvo en casos concretos claro está, que los hay. Y además creo que es algo natural, es normal que el pueblo quiera distraerse. Aunque este es un tema que dá para mucho, y nadie tiene la verdad absoluta sobre él.
Por otra parte, hay una gran parte de la gente que no está para nada distraida, probablemente no lo ha estado nunca, lo que está es cansada, hastíada incluso, e igual que no confían en la clase política tampoco tienen demasiada fé en los sindicatos o en las organizaciones que los convocan para salir a la calle (haciéndolo por cierto tarde y mal). Todos lanzan proclamas de un color u otro, algunas ambiguas, otras populistas y sonoras, otras ancladas en el pasado, pero nadie dá soluciones reales, bien por que no las tienen, bien porque creen ciegamente en las recetas más afines a su ideología o las de la organización a la que pertenecen o con la que simpatizan, sin mirar más allá.
Aún con todo sí, la gente debería protestar cuando un gobierno permite que puedan despedirla hasta por toser, entre otras cosas.
Pero mucho me temo que es el sistema el que manda.
weno, y nadie se ha dado cuenta que ha coincidido el primer partido de la selección con la aprobación en el congreso del decretazo?
ResponderEliminar¿casualidad?
Qué de verdades dices compañero...
ResponderEliminarEsa mezcla de marx y george orwell para finalizar tu opinion me gusto,
ResponderEliminarbien es verdad que como dice octavio el pueblo se entretiene solo, pero ya Orwell lo decia en sus tiempos como el futbol y en esos tiempo el boxeo eran los deportes de las masas, por ello el mejor vehiculo para mantenerlas entretenidas mientras su futuro se va a la mierda, pero que mas da, la selección ganará!
Para concluir, añadir que , tambien citando a Octavio, el gran problema es que ya no se cree en nada, no se cree en el gobierno sea cual sea el partido, no se cree en las organizaciones obreras, desacreditadas hace ya tiempo, y es normal porque ambas incurren en el mismo problema... no luchan por todos, si no por los ideales en que se han fundado, haciendo eso no pueden llegar a nada, solo piensan en votos y en lo que significara hacer tal o cual en vez de pensar en las soluciones que realmente acaben con el problema aunque puedan terminar desacreditados.
Quiza el recorte pueda ser eso que necesitan, la solucion, pero algo tan frio, tan rapido en hacer, y tan tardío respecto a cuando debiese haberse hecho es dificil de apoyar, sobretodo cuando más parece un intento de salir a flote ellos que el propio país..